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Mail Boxes Etc. organiza jornadas informativas para comunicar las ventajas de formar parte de su red de franquiciados

  • Publicado el 14 de Mayo de 2019

Mail Boxes Etc. organiza un conjunto de sesiones informativas para emprendedores que se planteen gestionar una franquicia líder como son las de MBE. Su competitividad, organización y el respaldo consolidado alcanzado en el mercado español la hacen una inversión fiable y segura. Las franquicias MBE poseen una gran variedad de servicios para llegar a un amplio target de mercado. Las jornadas informativas están pensadas para ofrecer información exhaustiva del modelo de negocio de la empresa a los interesados.

Mail Boxes Etc.. Son muchos los emprendedores que apuestan antes por un modelo de negocio basado en una franquicia que por un comercio tradicional. Ello se desprende de las estadísticas que, tanto a nivel nacional como internacional, demuestran el asentamiento de esta modalidad de comercios. El sistema de franquicias español registró una facturación de 27.707,2 millones de euros a cierre de 2018, un 0,4% más que el año anterior, según el informe «La franquicia en España 2019», realizado por la Asociación Española de Franquiciadores (AEF).

Mail Boxes Etcétera propone estas jornadas informativas para poder compartir el máximo de información con los empresarios interesados en abrir una franquicia. El formato de las reuniones está especialmente pensado para que los asistentes puedan preguntar sus dudas y solicitar información directamente con los franquiciados de área. Es un primer contacto personal con la marca que suele ser muy positivo.

Mail Boxes Etc. organiza jornadas informativas para comunicar las ventajas de formar parte de su red de franquiciados

Las principales ventajas para un franquiciado MBE son: El poder de una marca. Cuando un emprendedor inaugura un negocio nuevo, uno de los problemas a los que se enfrenta es el de tener que dar a conocer el producto y hacerse un hueco en un mercado cada vez más competitivo. Eso no sucede con las franquicias. La marca ya es conocida, tiene prestigio, por lo que un cliente, simplemente al leer el rótulo del negocio, va a conocerlo inmediatamente.

Modelo de negocio. En las franquicias ya existe un modelo de negocio establecido, por lo que no hay que partir desde cero. Es decir, los programas informáticos, la estructura de la plantilla, el plan de marketing, los recursos tecnológicos… Todo viene ya preconfigurado y, lo que es más importante, ya ha demostrado su valía.

Apoyo corporativo. Aquel que decide montar una franquicia no se encuentra solo. Tiene el apoyo de la empresa madre que le asistirá si tiene algún problema. Por supuesto, hay una fase de aprendizaje de todos los procesos y sistemas a poner en práctica. Por lo que el franquiciado siempre tiene marcada una ruta que seguir.

Asistencia. En una línea muy parecida a la anterior. La mayoría de las franquicias ofrece apoyo logístico para sus franquiciados. Renovación. Otra de las ventajas radica en el hecho de pertenecer a una empresa con gran experiencia. Lo normal es que la empresa quiera seguir creciendo y evolucionando, por lo que habrá una actualización permanente tanto de los procesos y el trabajo interno como de los productos o incluso del mobiliario del lugar. Así, el franquiciado obtiene un negocio ligado permanentemente a las últimas tendencias. Publicidad. La franquicia pertenece a una poderosa marca con poder para desarrollar campañas publicitarias. Algo de lo que también se beneficia cada uno de los establecimientos.

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